Dos bloques con fósiles de dinosaurios de la colección del MUJA se han escaneado en un hospital veterinario de Gijón
20/12/2017.- Dos bloques con fósiles de dinosaurios de la colección del Museo del Jurásico de Asturias (MUJA) se han escaneado en un hospital veterinario de Gijón este martes 19 de diciembre en el Hospital Veterinario Asturpet en Gijón.
El traslado de los bloques con los huesos de dinosaurios se efectuó con la ayuda de dos colaboradores habituales en las labores de recuperación de material de los acantilados, Javier Martínez y Joaquín Victorero (Keku), del camping Costa Verde de la playa de La Griega en Colunga.
José Mario Larrinaga, veterinario del Hospital, y José Meana, veterinario de la clínica Covadonga (Villaviciosa), movidos por su interés con todo lo relacionado con el conocimiento de los animales, aunque en este caso se trate de vertebrados que habitaron nuestra región hace unos 154 millones de años, estuvieron entusiasmados con la idea de realizar el TAC y colaborar en el estudio de estos restos fósiles. Para poder llevar a cabo el escaneo, el equipo del MUJA contó además con el apoyo técnico de Toshiba Medical System, que se encargó de calibrar el tomógrafo, y del veterinario diplomado europeo y americano en imagen Vicente Cervera que se encargará de interpretarar las imágenes.
Los dos bloques con huesos de dinosaurios articulados han sido preparados previamente por el equipo de investigación del MUJA y por Irene Sánchez Cela, licenciada en Geología por la Universidad de Oviedo, que ha sido contratada con cargo al proyecto del paleontólogo especialista en dinosaurios Oliver Rauhut del Bayersiche Staatssammlung Center de Munich, quien visitó las instalaciones museísticas hace tan sólo unos días.
La idea del proyecto es extraer los huesos por completo de los dos bloques de arenisca que los contienen, con el fin de observar sus características y proceder a la eventual clasificación de estos reptiles; los huesos se encuentran tanto en la superficie como en el interior de los dos bloques citados. Las areniscas que engloban los huesos tienen escaso contenido en carbonato, lo que dificulta su preparación mediante el ataque químico con ácidos. Debido a este problema, se consideró más adecuado realizar una tomografía axial computarizada (TAC) de los dos boques y así obtener una reconstrucción tridimensional de los huesos para intentar una primera clasificación de los mismos. Con la reconstrucción 3D también podría conocerse la profundidad a la que están enterrados los huesos dentro de la roca, lo que permitirá al equipo investigador conocer su posición exacta en la misma y proceder a su preparación sin riesgo de dañarlos.
El bloque con el esqueleto parcial del dinosaurio ornitópodo de Quintueles tiene en la actualidad un peso de unos 110 kg, mientras que el de Villaverde, que incluye algunas vértebras articuladas y varios de los huesos de la cadera, pesa alrededor de 40 kg.
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